19 abr 2011

New York.

Nueva York, es algo más que la ciudad más importante de los Estados Unidos. Nueva York se ha convertido en una ciudad de leyenda gracias a las miles de películas, series de telvisión e historias que nos han llegado de ella. Estar en Nueva York es como darse un paseo por una película, con rincones que se sienten ya conocidos anteriormente aunque sea la primera vez que se visitan.
Los 19 kilómetros de la isla de Manhattan albergan una enorme cantidad de vida y leyendas. Desde poder pasear por el Times Square, ir de compras por la Quinta Avenida, patinar en invierno en la pista de hielo del Rockefeller Centre, poder ver las vistas de la ciusas cubierta de rascacielos desde lo alto de Empire State, ver un partido de béibol en el Yankee Stadium o pasearse por el corazón financiero del Mundo.

Paris.

París, una de las ciudades más bellas del mundo, la más visitada, y probablemente la más romántica de las que puebla el planeta, hace honor a su fama y no defrauda a nadie que acude a visitarla, sin que más bien, a la hora de partir el viajero siente tener que partir, y lamente no disponer de más tiempo para volver en seguida o quedarse más tiempo en una ciudad mágica, con un encanto especial que se percibe en casa esquina, cada plaza, o simplemente en cada uno de sus cafés.

El sobrenombre de "Ciudad de la Luz" se debe a que París fue la primera ciudad en dotar a sus calles y edificios importantes de luz eléctrica, lo que causó admiración en todo el mundo.






Roma.

Roma, la ciudad de algunos de los monumentos más famosos del mundo, como el Coliseo o La Fontana di Trevi, es también la ciudad de las mil iglesias; una metrópoli caótica que es tan particular que alberga dentro de sí todo un estado -como es el Vaticano-; además de todo esto, es reconocida por ser capital de un país con una de las cocinas más populares a nivel internacional.
Pero Roma son muchas más cosas: es un museo al aire libre, como muy a menudo se escucha, repleta de esculturas y fuentes preciosas en sua preciosas plazas, además de casi una veintena de obeliscos, traídos en su mayoría directamente de Egipto tras su conquista. Es también una de las cuidades más caóticas en cuanto al tráfico de Europa; es una capital que seguramente sorprende por la suciedad y el aspecto decadente de muchas de sus calles, por la irregularidad del firme, por la belleza de la práctica totalidad de los edificios.

London.

Mas allá de los mitos referidos a la niebla o al té de las cinco, Londres es una ciudad lista para ser descubierta que posee lugares enigmáticos, históricos y placenteros altamente recomendables para el espaecimiento.
Hoy en día, esta capital europea es uno de los centros urbanos que ofrece una inmensa cantidad de atractivos a la hora de pasear y disfrutar, muchos de ellos de entrada libre y gratuita.
Museos, parques, palacios, Catedrales, paseos y diversos eventos le aseguran al visitante buenos momentos y diversión sin lugar a dudas.